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PERRIS: Jóvenes entrenan para pelear por su futuro en P-Town Boxing Academy en Perris

  • Arturo Ramos, 13, trabaja con su instructor, Ángel Ochoa, en...

    Arturo Ramos, 13, trabaja con su instructor, Ángel Ochoa, en P-Town Boxing Academy en Perris el miércoles, 18 de noviembre 2015.

  • Boxeadores jóvenes trabajan en sus golpes con el instructor Ángel...

    Boxeadores jóvenes trabajan en sus golpes con el instructor Ángel Ochoa Jr. durante una reciente clase en P-Town Boxing Academy en Perris.

  • Ángel Ochoa dirige las operaciones de P-Town Boxing Academy en...

    Ángel Ochoa dirige las operaciones de P-Town Boxing Academy en Perris. En esta foto Ochoa está sobre el cuadrilátero, de donde observa a los boxeadores jóvenes el miércoles, 18 de noviembre 2015.

  • Los boxeadores trabajan en la resistencia de sus piernas bajo...

    Los boxeadores trabajan en la resistencia de sus piernas bajo la observación del instructor Ángel Ochoa Jr.

  • Robert Yáñez, de 12 años, en entrenamiento con manoplas con...

    Robert Yáñez, de 12 años, en entrenamiento con manoplas con el instructor Ángel Ochoa Jr., mientras que otros esperan su turno en una clase de boxeo para jóvenes en la Academia de Boxeo P-Town en Perris, el miércoles, 18 de noviembre.

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Ángel Ochoa simplemente quiere brindarles a los niños una oportunidad de luchar. Niños como Luke Gutiérrez.

Antes de que Gutiérrez llegara a las puertas de la Academia de Boxeo P-Town de Ochoa, hace varios años, su vida era un caos en un espiral sin salida.

Gutiérrez, el quinto de una familia de ocho, creció cerca de Mead Valley; admite que no le interesaba la escuela y tenía un buen historial de peleas callejeras.

Entonces conoció a Ochoa, a quien ahora considera un segundo padre.

Ochoa, de 43 años y residente de Riverside, es entrenador de boxeo desde hace mucho tiempo y propietario de P-Town, ubicado en una bodega ventilada en la esquina de un sector empresarial en una sección de Perris.

Más que eso, Ochoa es un salvavidas para los jóvenes del área que se encuentran a la deriva.

“Juventud en riesgo —me gusta trabajar con ellos, y ojalá pueda hacerlo antes de que sea demasiado tarde”.

En estos días, Gutiérrez es un peso mediado, zurdo, con un futuro prometedor, cuyo sueño de pelear profesionalmente podría hacerse realidad muy pronto.

“Ángel ha hecho mucho por mí”, dijo Gutiérrez, ahora de 24 años. “Estoy muy agradecido con él; lo aprecio. Sin él, estaría en la cárcel…o muerto. Andaba en pandillas…y ese no era el camino correcto”.

Ochoa tiene planes para que Gutiérrez se convierta en un profesional del boxeo en algún momento del 2016.

Más allá de eso, y quizá lo más importante, Gutiérrez está casado y muy pronto celebrará su sexto aniversario de bodas, y es padre de tres niños pequeños.

“Ángel le dio la vuelta a mi vida”, dijo Gutiérrez.

El boxeo es la pasión de Ochoa. Los problemas físicos le impidieron hacer realidad sus propios sueños en el cuadrilátero, pero forjó una carrera exitosa como entrenador y fue incluido en el Salón Nacional de la Fama del Boxeo en marzo. También se desempeña como vicepresidente del Museo de las leyendas del WBC en San Bernardino.

Ochoa considera su programa de boxeo juvenil —que cuenta con cerca de 125 niños y niñas, de Perris y las comunidades circundantes— como un posible cambio de vida para muchos jóvenes del área.

Los boxeadores mayores que entrenan en el gimnasio, como Gutiérrez y el hijo de Ochoa, Ángel Jr., ayudan a los más chicos a cambio de las cuotas de entrenamiento.

“Me gusta que lleguen aquí desde chicos, en sus años de formación”, dijo Ochoa. “Tienen que aprender cosas desde que son pequeños. Y eso se queda grabado en su mente, aunque en el futuro talvez hagan algo malo”.

Los funcionarios de la ciudad de Perris apoyan a Ochoa y están de su lado, dijo. Ellos lo ayudaron a asegurar la ubicación del gimnasio, que se inauguró en el 2009, y le ofrecieron financiamiento.

La concejal, Rita Rogers dijo que, al principio, la ciudad respaldó el programa con fondos de reurbanización, hasta que el gobernador Jerry Brown disolvió a esas agencias estatales en el 2011.

En años recientes, el Concejo Municipal de Perris aprobó fondos para la Subvención de Desarrollo Comunitario destinados al programa de boxeo y fútbol juvenil ‘Perris Pantheres’, dirigido por Andre Mitchel, un agente del Departamento de Policía de Los Ángeles y co-propietario de P-Town.

Esas subvenciones ascendieron a un total de $96,650 en los últimos tres años, explicó el gerente adjunto de la ciudad, Darren Madkin. Ochoa reconoce que se necesita mucho más que eso para mantener abiertas las puertas del gimnasio. Cuando el lleva al equipo a competir en torneos, Ochoa indicó que él paga por todo —desde la inscripción a la cinta de aislar para las manos—de su propio bolsillo.

Ochoa creció en San Jacinto, donde su primer contacto con el boxeo fue a través de un programa de actividades de liga de la policía. Cuando su familia se mudó a Riverside y buscó algo similar, no encontró programas de boxeo orientados a los jóvenes. Los gimnasios que encontró estaban ubicados en vecindarios problemáticos, así que se involucró en el béisbol, explicó Ochoa.

El gimnasio P-Town, dice Ochoa, tiene como objetivo abordar esos desafíos.

“Es mucho más que una simple relación alumno-entrenador”, dijo Rogers. “Realmente se interesa en la vida de los niños; y los niños lo respetan y escuchan”.

En una noche entre semana reciente, el gimnasio estaba lleno de niños. Era una escena estructurada, con un grupo de niños más pequeños haciendo ejercicios en un cuadrilátero a nivel del suelo; los jóvenes practicando con las bolsas de boxeo en la pared del fondo; y, Ochoa entrenando con Gutiérrez en un ring elevado.

Jasmine Arsola, de 10 años, tiró sus guantes de boxeo en un casillero con la frase “Jazzycakes” escrita en letras grandes en un pedazo de cinta adhesiva en la parte superior. Después, se apresuró para unirse al grupo en entrenamiento. Ella es una de varias chicas en el gimnasio.

“Mi hijo mayor practica las artes marciales mixtas, y ella lo acompañaba”, dijo el padre de Jasmine, Richard Arsola, de 31 años y residente de Moreno Valley.

“Cuando ella vio a su hermano, le dije: ‘Hay un gimnasio de boxeo, ¿quieres intentarlo?’; y ella me contestó: ‘Ok, lo puedo intentar’, y le gustó”.

Entre los adultos sentados en sillas plegables en un rincón del gimnasio se encontraba Ruth Flores. Estaba a cargo del hijo de su vecino, Arturo Ramos. Flores, de 57 años, dijo que de vez en cuando ayuda al padre de Arturo, de 12 años, con el transporte hacia el gimnasio.

“Creo que él es el futuro Oscar De La Hoya, de verdad lo creo así”, dijo Flores. “Él es muy dedicado”.

LA ACADEMIA

Nombre: Academia de boxeo P-Town.

Propietario: Ángel Ochoa.

Programa para jóvenes: Ofrece servicios para niños de 5 años y mayores.

Costo: $50 por mes. Se ofrece ayuda financiera.

Dirección: 3110 Indian Avenue en Perris.

Información: 951-333-5739; angel.ringleader@gmail.com

OTROS PROGRAMAS

Highlanders Boxing Group

Ciudad: Highland.

Información: highlandersboxingclub.org

Jurupa Valley Boxing Club

Ciudad: Jurupa Valley

Información: Facebook: Jurupa Valley Boxing Center

Meadowbrook Boxing Club Academy

Ciudad: San Bernardino

Información: Facebook: Meadowbrook Boxing Club Academy

Raincross Boxing Academy

Ciudad: Riverside

Información: raincrossboxingacademy.com

Supreme Boxer Boxing Club

Ciudad: Lake Elsinore

Información: www.supremeboxer.com

Temecula Boxing Training Academy

Ciudad: Temecula

Información: temeculaboxing.net

United Boxing Academy of Moreno Valley

Ciudad: Moreno Valley

Información: Facebook: United Boxing Academy of Moreno Valley

Warzone Boxing Club

Ciudad: Rancho Cucamonga

Información: warzoneboxingclub.com