El fotógrafo, Mark Rightmire a lo largo de los años ha tenido una fascinación por fotografiar los murales pintados en edificios por artistas en pueblos y ciudades en los lugares que he viajado.
Desde Bucyrus, en el estado de Ohio o Pittsburgh, en el estado de Pensilvania pasando por Santa Cruz a Chemainus, en la Columbia Británica o fuera de los Estados Unidos en Dublín, capital de Irlanda o la capital alema, Berlín.
Los tamaños de estos murales varían en altura, y pueden llegar a hasta tres pisos sobre la tierra.
“Sigo preguntándome cómo un artista puede pintar tan hermoso trabajo en una escala tan grande,” dijo Rightmire.
Sin embargo, las personas no tienen que comprar un ticket de avión para ver realmente estos maravillosos murales en los edificios.
Por el costo de 30 minutos en un parquímetro, puede pasear por las calles y callejones en el centro de Santa Ana y ver estas obras de arte, que es definitivamente un regalo visual.
